
La novela narra la historia de una familia que vive en una casa solitaria en las dunas de Picardía, una región costera del norte de Francia.
La trama se desarrolla en un entorno natural agreste y a menudo hostil, donde la vida de los personajes está marcada por la lucha contra los elementos y la necesidad de sobrevivir en un paisaje salvaje. La historia explora temas como la relación del ser humano con la naturaleza, la familia, el amor, la soledad y la lucha por la existencia.