

El "positivismo jurídico" ha consistido en una oposición contra el pensamiento político y jurídico en la Ilustración. Es un movimiento complejo que se desarrolla en el primer tercio del siglo XIX, en lo que entrelazan varios tintes, no siempre reconciliables. En una cara, una sensibilidad más grande para la cosa humana determinada que se ha llamado la "rebelión de la conciencia contra razón". El sentido más fuerte para la humanidad que se muestra en los Románicos, tocados normalmente por el idealismo, hecho que el siglo de levantamiento XIX reaccionó contra "el egoísmo razonable o juicioso" de los ilustrados, que permanecían en la persona de Kant.
Debido a la médula de una mayor parte de la reacción romántica estaba en una capacidad más grande para sentir las demandas de la caridad cristiana. En que la manera, el "positivismo insultado" en ley, casi tenía en una cierta manera un origen confesional protestante. Por la otra cara, el 1800 reacciona reclamando la construcción definitiva del estado, como la nueva manera de la dominación y de la coexistencia que tuvo que substituir el viejo régimen. El "positivismo jurídico" también era la cara político-jurídica que hizo posible la realidad del estado. El grito de Anselm Feuerbach: "Constitución, Organización, Legislación" reasume, se preocupa de una mayor parte de los juristas sin el principio del siglo pasado.
El Profesor Francisco Carpintero muestra las motivaciones y las caracterizaciones diversas que la universidad del siglo XIX llevó la cara a que mide el tiempo reclamado. Él nos introduce suavemente en la gestación de la edad contemporánea.