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No es que los padres sean difíciles, complicados, antipáticos, bordes, carcas, ¡no! Es que a veces son francamente IMPOSIBLES.
Máter Metepatus le enseñará a tu novia una foto en la que estabas monísimo disfrazado de cupido con una peluca rubia y un taparrabos rosa. También los hijos son difíciles, complicados, antipáticos y... Por ejemplo, Filius Bolerus es un ser generoso, que lo único que desea es evitarle disgustos a sus padres. Para ello, emplea toda su imaginación en inventar unas bolas estupendas. Existe una tercera fauna. Se trata de los hermanos. Fráter Inocentísimus es capaz de las mayores barrabasadas, pero, llegado el momento, desaparece de la escena del crimen y le cuelga el muerto al primero que pasa por allí.
Cuidado con este libro, en él hay otros interesantes especímenes. ¡Algunos son peligrosos!